El plan de contingencia implementado por la Autoridad de Transporte para Lima y Callao parece que no ha tenido éxito, pues se pudo observar gran cantidad de pasajeros en la avenida Abancay que esperaban su movilidad para trasladarse a sus destinos.
Muchos de los usuarios tuvieron que esperar por varios minutos porque los buses que transitaban por el lugar estaban completamente abarrotados, lo que generó malestar e incomodidad en el primer día de suspensión del servicio del Corredor Morado.
Lo peor de todo es que muchas personas se vieron obligados a tomar más de dos líneas para llegar a sus viviendas o trabajos, lo que ocasiona no solo pérdida de tiempo, sino también significa un gasto mayor al presupuesto diario que gastaban.
CORREDOR AZUL Y ROJO
Hay que señalar que, además del Corredor Morado, el Corredor Azul y Corredor Rojo también podrían paralizar sus operaciones. Esto se debería a una millonaria deuda por parte del Ejecutivo, que haría insostenible la prestación del servicio.