Xiomara García fue una ciudadana cubana que vivió 60 años en nuestro país, y que falleció el pasado mes de agosto, pero aún no descansa en paz ya que su cuerpo se mantiene en la Morgue Central de Lima, debido a que no tiene descendencia ni familia directa.
Ante ello, un grupo de vecinos muy allegados a la extranjera vienen batallando, desde el día de su muerte, para darle cristiana sepultura, antes que pase a una fosa común.
Pero a pesar de la buena intención de estas personas, la ley no les permitiría evitar que los restos de Xiomara García pase a una fosa común.
Según la denuncia, el fiscal a cargo del caso les ha negado la entrega del cuerpo, debido a que no tienen un parentesco sanguíneo. Sin embargo, el fiscal, de acuerdo a ley, ya le entregó a la Beneficencia de Lima, los bienes de Xiomara García.