Uno de los proyectos más importantes que se viene realizado en el Perú, la refinería de Talara, tiene un sobrecosto de más de 1.110 millones de soles de perjuicio económico al estado vinculados a un proyecto de modernización, que fueron detectados por la Contraloría General de la República.
En la auditoria identificaron la demora en la contratación de unidades auxiliares y trabajos complementarios que tiene como objetivo brindar servicios al proceso de elaboración del petróleo, provocando el sobrecosto en pagos a terceros y empresas privadas.
El titular de la entidad Nelson Shack reveló estos hallazgos tras la realización de una auditoria de contratación de unidades auxiliares.
44 funcionarios y ex funcionarios de la petrolera estatal tendrían presunta responsabilidad civil y administrativa según constato la Contraloría General de la República.
