Ante el anuncio de la intangibilidad de los acantilados de la Costa Verde, los vecinos de la zona mostraron su parecer y aseguraron que no están dispuestos a abandonar sus viviendas.
“No tenemos a donde ir. El problema es que el Consejo ha llenado el agua", expresaron algunos residentes. Sin embargo, cabe preguntar ¿qué pasará con las personas que han invertido sus ahorros en adquirir estas viviendas?
Jorge Zapata, presidente de obras de CEPEC, indica que "a partir no se podrán construir nuevos edificios a 120 metros del borde de acantilado.Lo que esta construido son derechos ganados. Y esos propietarios tienen derecho a conversar su propiedad".
Sin embargo, estas construcciones no contarían con todas las normas de seguridad, lo que es un hecho es que el peso de estas edificaciones generó el deslizamiento de rocas ocurrido el pasado 9 de agosto.
