Integrantes de una organización criminal dedicada al fraude electrónico fueron capturados al interior de un edificio ubicado en una zona residencial de San Miguel. La banda estaba compuesta por cuatro ciudadanas venezolanas, que estafaba diariamente a dos personas.
Los estafadores operaban bajo el esquema de un call center, que haciendo uso de una base de datos llamaba diariamente a usuarios de diversas entidades bancarias con la finalidad de obtener datos específicos y realizar costosas compras a su nombre.
Un total de ocho personas fueron detenidas y trasladadas a la Dirincri del Cercado de Lima. El cabecilla fue identificado como Rolando León Caneva. Todos serán denunciados por delito informático y falsificación de documentos.
