La Policía Nacional incautó por lo menos 66 mil muñecos coleccionables distribuidos por supermercados Tottus, pues dicha mercadería no contaba con registro sanitario.
Los productos, que se hallaron en un almacén de Tramarsa, en el Callao, fueron trasladados a un local de la Sunat en Lurín y en los próximos días se obtendrán resultados de su toxicidad. Según la fiscal Nancy Ventura, como estos productos están en contacto con las personas, los niños, las normas han establecido que haya una autorización de Digesa para proteger su salud.
Por otro lado, Tottus, ha explicado que ya cuentan con un permiso emitido por Digesa, con fecha del 5 de junio, por lo que negaron las acusaciones en su contra, basándose en un comunicado del 5 de febrero, en el que el Ministerio de Salud no exigía la autorización sanitaria para la distribución del producto.
Finalmente, horas después, a través de un nuevo comunicado, el supermercado señaló que la intervención del Ministerio Público se produjo debido a un error administrativo en el proceso de importación que ya fue subsanado.