Ingresaron de sorpresa a un centro de venta de medicamentos, en su mayoría los denominados ‘naturales’, ubicado en La Victoria. Su objetivo: incautar productos de dudosa procedencia que se vendían en el lugar.
Los efectivos registraron y casi de inmediato incautaron todos los productos falsificados, los que no contaban con registro sanitario y los que se encontraban en condiciones inadecuadas. Incluso, se encontró medicamentos vencidos.
Por ejemplo, un producto que venció en el 2014, pero se continuaba vendiendo. Algunos comerciantes, en el colmo de la desfachatez, evadían su responsabilidad. Fueron 45 puestos los intervenidos. En muchos de ellos, solo se encontró a los trabajadores, mas no a los propietarios.
Los responsables de vender estos productos estarían incurriendo en el delito contra la salud pública y podrían recibir una pena no menor de cuatro años ni mayor de seis.