El peruano Rafaello Cárpena ha sido testigo de la crueldad de la guerra desde sus inicios en febrero, cuando Rusia anunció su operación militar a Ucrania, y que hoy se ha convertido en una invasión sin límites.
Hace pocos días, imágenes de la crueldad de la guerra ocasionaron indignación mundial, pues drones “suicidas” o “kamikazes” atacaron a civiles en la capital ucraniana, dejando varios heridos y muertos.
De acuerdo a Cárpena, indicó que hoy hubo cortes de electricidad e internet, también están sin servicio de agua potable. “Hemos sufrido cinco ataques en la zona, cinco drones kamikaze iraníes han impactado edificios y zonas residenciales”, manifestó Rafaello, quien también indicó que las clases escolares se han suspendido.
ALARMAS QUE DETIENEN LA CIUDAD
Cárpena señaló que cada vez que las alarmas suenan, prácticamente toda la ciudad se detiene, los negocios cierran, los metros dejan de funcionar, etc. Explicó que los ciudadanos usan una aplicación oficial del gobierno que avisa con una alarma si habrá un ataque aéreo para que la población esté prevenida y pueda refugiarse.
Añadió que aunque algunas grandes marcas siguen sin funcionar en el país, en general no hay un desabastecimiento de productos de primera necesidad.
EL DRAMA DE RAFAELLO CÁRPENA
El peruano Rafaello Cárpena ha tenido que viajar a Ucrania por segunda vez, pues su pareja sustrajo internacionalmente a su hijo de tres años y lo tendría escondido en Ucrania en malas condiciones.
“Yo estoy buscando solo a mi hijo sin que las autoridades peruanas hagan su trabajo de investigar”, manifestó el peruano que reside en Kiev desde hace meses buscando.
“Suplico a las autoridades peruanas. Este caso lleva más de un año, mi hijo fue sustraído internacionalmente y no han hecho nada para asegurar su bienestar. Mi hijo está en medio de una guerra”, pidió Cárpena a las autoridades peruanas.