La segunda ola de calor en Europa sigue causando serios estragos en la población. Los termómetros han registrado temperaturas que superan los 40°c, por lo que algunos ya aseguran que julio se podría convertir en el mes más caluroso registrado en la historia.
No solo las personas sufren este duro temporal, pues los animales también son seriamente afectados. Algunos productos alimenticios como el chocolate, se derrite en solo minutos.
Este clima extremo ha dejado cinco muertos en París, Francia, y 20 departamentos se encuentran en alerta roja.
En Italia, cinco ciudades al norte fueron declaradas en alerta roja: Perugia, Torino, Brescia y Firenze. Ante la creciente calor, los mejores aliados para los europeos con las piscinas y fuentes de agua. Esta situación ha ocasionado que en España y Reino Unido se eleven las alarmas.
