La imprudencia de un conductor en Louisville, Estados Unidos, terminó en tragedia. Pese a que habían dado aviso que el tren estaba a punto de cruzar, el sujeto piso el acelerador e intentó ganarle el paso. Sin embargo, no logró su propósito y fue alcanzado por la locomotora.
Por otro lado, un anciano tailandés jamás imaginó que un tranquilo paseo en bicicleta sería el último de su vida. Manejaba despacio en la carretera, cuando un automóvil a toda velocidad lo impacta y sale despedido.
Según informes policiales el conductor se encontraba bajo los efectos del alcohol y un menor de dos años también se convirtió en víctima de su imprudencia al volante. Las fuertes imágenes fueron registradas por una cámara de seguridad.