Acojan a los divorciados que se vuelven a casar. Esta es la principal exhortación del Papa Francisco en su carta apostólica titulada “La alegría del amor”. En el documento, el Santo Padre pide a sacerdotes y obispos a reintegrar a las parejas diversas que se sientan en pecado.
En tanto, respecto al matrimonio entre personas del mismo sexo, Francisco se mostró contrario a que sus uniones sean consideradas como un matrimonio. Sin embargo, pidió respeto y tolerancia para las comunidades gays.
La carta es el resultado de los dos sínodos consecutivos sobre la familia, en la encíclica papal de 267 páginas, donde Francisco trata diversos temas como las crisis conyugales, la educación de los hijos, sexualidad, la adopción, el aborto y la eutanasia.