El periodista y analista político Jaime de Althaus, en una entrevista con Tatiana Alemán en el programa '2025 en 24 Horas' de Panamericana Televisión, abordó el reciente atentado contra el candidato colombiano Miguel Uribe, destacando la necesidad de esclarecer los orígenes del ataque. “Lo que hay que determinar es si hay alguna organización detrás de este (intento de) asesinato”, afirmó De Althaus, planteando la posibilidad de que el sicario actúe bajo órdenes de “algún grupo político o criminal” vinculado al narcotráfico, como ocurrió en el pasado en Colombia con casos relacionados a figuras como Pablo Escobar. También sugirió que el atentado podría ser consecuencia del “clima de confrontación que ha creado Petro en la sociedad colombiana”, donde un joven de 15 años, posiblemente con problemas mentales, pudo haber sido influenciado por esta polarización.
De Althaus también cuestionó la seguridad asignada a Miguel Uribe, señalando que “incluso se dice que este candidato tenía una seguridad ya dispuesta de antemano, pero esa misma seguridad había sido disminuida”. Advirtió que, de confirmarse esta reducción, podría haber “una responsabilidad directa del Gobierno, dolosa o realmente culpable”, y urgió a investigar si fue una acción deliberada para facilitar el ataque. El analista expresó preocupación por la ola de violencia política en la región, citando que en Ecuador, desde 2023, “ha habido 22 alcaldes o servidores municipales asesinados” y un total de “46 asesinatos de candidatos y actores políticos en general”, además de 9 jueces o fiscales, atribuidos principalmente al narcotráfico.
El panorama de la criminalidad en el Perú y la región
En el caso del Perú, De Althaus destacó que, a diferencia de países como Colombia, Ecuador y México, el impacto del narcotráfico no ha sido tan devastador, afirmando: “Felizmente no estamos en ese nivel todavía”. Sin embargo, señaló casos aislados como “el asesinato de un teniente coronel de San Juan de Lurigancho” y de dirigentes de construcción civil por extorsión, además de líderes ecológicos en la selva. Explicó que “la cadena de valor del narcotráfico es mucho más completa que la minería ilegal”, ya que implica controlar puertos y mercados locales, lo que genera disputas entre bandas. En contraste, la minería ilegal, aunque influyente incluso en el Congreso de la República, opera de manera diferente, pues “el oro puedes producirlo ilegalmente, pero eventualmente lo legalizas en una planta procesadora y lo exportas legalmente”.
Sobre la criminalidad en el Perú, el analista apuntó a la llegada de ‘El Tren de Aragua’ como un factor clave, señalando que “las extorsiones entraron con ‘El Tren de Aragua’ y ‘El Tren de Aragua’ entró a su vez con la gran migración venezolana”. Esta organización transnacional, que opera desde la cárcel de Tocorón en Venezuela, ha impulsado la extorsión, la trata de personas y, en menor medida, los secuestros. Aunque el Perú no cuenta con bandas tan grandes como ‘Los Lobos’ o ‘Los Choneros’ de Ecuador, De Althaus advirtió que “esto ha generado asesinatos”, junto con la minería ilegal en zonas como Pataz. Concluyó destacando que “ahora hay una estrategia para combatirla”, pero llamó a estar atentos ante las próximas elecciones, preguntándose: “¿Qué nos va a pasar acá en las próximas elecciones que vienen?”.
