Mientras la Policía Nacional lo buscaba en Bolivia y Brasil, Erick Moreno Hernández, alias “El Monstruo”, habría permanecido en Lima Norte planeando y ejecutando atentados junto a su organización criminal. Así lo reveló el comandante en retiro Francisco Rivadeneyra, exsegundo al mando de la Brigada contra el Crimen Organizado, quien denunció que recibió amenazas directas del delincuente en diciembre pasado.
Mensajes intimidantes, ofrecimientos de sobornos y hasta advertencias contra su vida fueron parte de la presión que ejerció Moreno Hernández sobre el oficial, quien lideró importantes golpes contra su red criminal. Sin embargo, cuando su ubicación fue finalmente rastreada en la zona norte de Lima, la operación para su captura se frustró debido a la falta de apoyo de los altos mandos, según Francisco Rivadeneyra.
A ello se suma la presunta complicidad de ciertos miembros de la Policía Nacional, quienes habrían filtrado información clave sobre operativos y facilitado la fuga del criminal. Un chat interceptado demostraría que efectivos en actividad alertaban a su organización sobre las intervenciones en su contra. Además, un documento interno advirtió sobre estas filtraciones, pero al parecer no se tomaron medidas efectivas.
BUSCAN RESPONSABILIZAR A RIVADENEYRA
Pese a las pruebas presentadas, la Policía Nacional ahora busca responsabilizar a Francisco Rivadeneyra por no haber concretado la captura de Moreno Hernández, alegando que su retiro fue por “conducta inadecuada”. Mientras tanto, el sanguinario cabecilla del crimen organizado sigue libre, sembrando el terror en la capital y poniendo en evidencia serias deficiencias en la lucha contra la delincuencia en el país.